Lo sé, puede ser que no. De hecho, seguramente que no. Pero un día tú y yo y todos los habitantes de la tierra éramos libres y pasábamos nuestros días bajo el sol y el viento y unidos a la tierra, ¿qué nos ha pasado? Nos hemos olvidado.
Por eso, te quiero ayudar a recordar: quien eres y a donde perteneces. ¿Para qué? Para que encuentres tu verdad, tu centro y tus ganas de vivir, la vida que te pertenece. Para que re-conectes contigo y con tu naturaleza esencial.
Ponte cómodo, porque aquí se acabo el correr. ¡Ya sé lo que me vas a decir! La inercia del ritmo social que llevamos, hace que no tengamos oportunidad de parar y mucho menos de tener un momento para nosotros.
Todo encaja de tal manera, que seguramente la simple idea, te haga gracia. Nos pasamos la vida enredados en una rueda que al final, no suele tener sentido.
¿Y SI PARAMOS UN MOMENTO?